¿Por qué se nos olvidan las cosas?

El olvidar las cosas es un problema muy común, ya que la mayoría de las personas experimentan momentos ocasionales de pérdida de la memoria, y no siempre puede achacarse a la edad. En realidad las causas son muchas, y aunque pocas veces indican problemas serios, sí pueden interferir con las actividades normales de la vida diaria.

“¿Para qué vine a esta habitación?”, “Iba a decirte algo pero… ¡se me olvidó! Los olvidos temporales son más comunes en las personas que son naturalmente distraídas. Si usted es una de ellas, el remedio es simplemente tratar de poner más atención en lo que haces. Pero la distracción o la falta de atención son una cosa, y la pérdida de la habilidad cognitiva, entre ellas la memoria, es otra.

Cuando se empiezan a tener estos episodios de olvidos breves, hay que buscar la causa. Hay muchas razones que pueden hacer que se te vayan olvidando las cosas, aunque sea de manera leve, o lo que se conoce como pérdida de la memoria transitoria.

Entre las más comunes están:

    El exceso del alcohol es una causa conocida de pérdida de la memoria.

    Fumar reduce la cantidad de oxígeno que llega al cerebro y, como consecuencia, perjudica el funcionamiento de la memoria.

    Su uso continuo de drogas provoca cambios en las sustancias químicas del cerebro, lo que dificulta recordar las cosas.

    La falta de sueño, tanto la cantidad del sueño como su calidad afectan la memoria. Si duermes muy poco o te despiertas con frecuencia durante la noche, puedes sentirte fatigado(a). Y el cansancio interfiere con la capacidad de captar la información y de recordarla después.

    Depresión y ansiedad. Si estás deprimido(a), te es difícil prestar atención y concentrarte, lo que afecta la memoria. Lo mismo ocurre con la ansiedad. Cuando te sientes tenso(a), no puedes concentrarte y tu capacidad de recordar disminuye.

    Estrés. Si la causa del estrés es un trauma emocional, puede dar lugar a la pérdida de la memoria.

    Nutrición deficiente. Una buena nutrición es importante para el funcionamiento correcto del cerebro. Debes incluir en tu dieta proteínas y grasas de alta calidad. No te olvides, además, que la deficiencia de las vitaminas B1 y B12 puede afectar la memoria.

    Envejecimiento. Normalmente provoca dificultad para aprender cosas nuevas, o puede que necesites más tiempo para aprenderlas. Pero no suele producir una pérdida de la memoria significativa, a no ser que vaya acompañado de alguna enfermedad.

Con información de: http://www.venelogia.com