La ausencia del deseo sexual en las mujeres de avanzada edad forma parte de un proceso natural y biológico.
Para el sexólogo Gerardo Giménez, las hormonas sexuales influyen mucho en el deseo. El estrógeno (hormona sexual femenina) es el encargado de producir el apetito sexual, pero cuando la mujer llega a cierta edad y viene la menopausia, la producción de hormonas decrece y con ella la libido.
Además, las mujeres cuentan con una cuota de hormona sexual masculina (testosterona). “También hay que evaluar si esta disminuye, ya que influye igualmente en el deseo femenino”, explicó.
“Independientemente de que haya disminución de las hormonas, si la mujer tiene una función sexual activa y frecuente e igualmente está acostumbrada a la actividad sexual, no tiene por qué sufrir un descenso. Hay experiencias de mujeres que se pueden mantener activas”, afirmó Giménez.
Otro de los factores tiene que ver con la actitud y con cómo la mujer se percibe a sí misma, es decir, si la mujer considera que “está muy vieja para la gracia”, probablemente lo asuma así y el deseo bajará, expresó el doctor.
El especialista enumeró las causas del descenso del apetito sexual: el proceso hormonal, los problemas de pareja, las experiencias traumáticas, los procesos depresivos y la ansiedad.
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